El mundo necesita una generación disruptiva. Los MiIlennials y la Generación Z marcan el futuro tanto como consumidores como en el mundo laboral. Desde cualquier vereda, es necesario conocer sus características y búsquedas personales.
Hoy son la generación más numerosa y, según una proyección de la consultora Deloitte, para el 2025, representarán el 75 % de la fuerza laboral del mundo.
Es una nuevo grupo de ciudadanos responsables, tecnológicos y comprometidos, que están íntimamente ligados a la innovación y el multitasking. Los Millennials y la Generación Z vienen para transformar la vida social actual y marcan un futuro disruptivo, tanto como consumidores, como en el mundo laboral. Desde cualquier vereda, es necesario conocer sus características y búsquedas personales.
Sus decisiones y unos hábitos de consumo diferentes están cambiando radicalmente muchos sectores. Sin embargo, una investigación de Deloitte revela una «generación interrumpida». Crecer en un mundo de transformación acelerada deja a los millennials y a la generación Z sintiéndose inquietos sobre el futuro, en concreto, sobre sus carreras, su vida personal y el mundo a su alrededor.
¿Cuáles son las prioridades de ésta generación disruptiva?
La Generación Millennial define a los nacidos entre 1983 y 1995 y la Generación Z (también conocidos como Gens Z) son los nacidos entre 1995 y 2000.
Podemos ver que son casi 40 años, y creer que 40 años no es nada, pero las nuevas necesidades son impensadas en años anteriores. Tener hijos, comprar casas y otros productos tradicionales ya no son prioridad. La ambición pasa más por vivir la experiencia de recorrer el mundo, conseguir un mejor balance entre vida personal y laboral, tener la posibilidad de trabajar de manera flexible, o autónoma. Y si, desdibuja la programación de nuestros padres y abuelos de “hacer con mucho esfuerzo” y se abren al permiso de “disfrutar y amar hacer”.
Aquí me recuerda la nota El trabajo en la Postmodernidad cuando describe el trabajo como una hermosa oportunidad de crecer y evolucionar, y no un mero “trabajo”, que “traba” “para abajo”.
Consumidores vs Colaboradores. El desafio
Como consumidores
Su vida pasa completamente por una existencia digital: redes sociales, aplicaciones, películas, música digital, etc. De allí el interés por la tecnología y en los nuevos usos de los dispositivos inteligentes desde cualquier pantalla. Asimismo, tienen una forma de entender el consumismo desde otro ángulo. Están más orientado a la opinión de referidos, las experiencias y no tanto en función a la intención publicitaria de los medios. Son muy críticos y exigentes, buscan la personalización, conciencia y que atiendan a sus preferencias. Las compañías deberán situar la experiencia del cliente en el eje central de su estrategia, en términos de relación, valores, comunicación y organización. Esto significa que, quienes impulsen la participación, la colaboración, la concientización y el aporte de ideas en la creación y el desarrollo de sus productos, conquistarán el corazón de los Millennials y Gens Z.
¿Qué tal si traigo un ejemplo?
A continuación, cuento la historia de dos millenials como consumidores que nos abrirá el camino para comenzar a describir y visualizar a ésta nueva generación en el mundo laboral.
Hace una década, Scott Norton y Mark Ramadan compañeros de apartamento, se graduaron en la Universidad Brown de EEUU. Tenían 22 años y sus vidas laborales temblaban por la crisis Financiera de 2008. Soñaban con emprender y veían que cada categoría de alimentos en el supermercado estaba mejorando, pero los condimentos, y específicamente el kétchup de la compañía Heinz, no habían evolucionado en 70 años. Estaban convencidos que nadie de su generación quería productos insulsos destinados a un mercado de masas y procedentes de las fábricas de grandes corporaciones. Así, empezaron a elaborar su propio ketchup orgánico en su apartamento y le dieron el nombre de Sir Kensington´s, un supuesto comerciante inglés que asesoró a la Compañía Británica del Este de la India en la adquisición de especias.
En el 2017 el negocio de Ketchup se convirtió en disruptivo. En abril de 2018, Unilever, la competencia de Heinz, adquirió la compañía por 140 millones de dólares, convirtiendo a sus creadores en millonarios. Hoy, el ketchup Sir Kensington´s está en los estantes de las grandes cadenas de supermercados como Walmart y Target.
En el mundo laboral
Teniendo como referencia el ejemplo anterior, ambos emprendedores tienen ahora 31 años. Pertenecen a una generación más exigente, que ve una oportunidad dentro de las amenazas del contexto, que toman acción de aquello que los deja incómodos, y que han transformado la empresa no solo en EEUU sino en todo el mundo.
Tal es así que, como colaboradores del mundo laboral, los millennials y Gens Z ganan fuerza en las organizaciones y dicen NO a los empleos convencionales. En general, patrocinarán y apoyarán a las empresas que se alinean con sus valores.
Frente a la implacable aceleración de la Inteligencia Artificial, las tecnologías cognitivas y la automatización, las empresas necesitan devolver regresar el sentido al lugar de trabajo y la identidad humana al trabajador. Tienen una visión diferente del trabajo, con más libertad y con una diversidad de ideologías, de género, de formas de pensar, de orígenes. Son autosuficientes y autónomos, y tienen una fuerte lupa en su “desarrollo y beneficio personal”. Valoran la participación y la colaboración, y exigen nuevos valores como la transparencia, la sostenibilidad y el compromiso social. El “management histórico” está obligado a cambiar de velocidad y encontrar nuevos caminos para aumentar la flexibilidad y la capacidad de creatividad. Requiere un espíritu de aventura e inteligencia en la ejecución.
El futuro y las preocupaciones
Indudablemente, desde cualquier ángulo, existen nuevos desafíos. Esta generación no es menos ambiciosa que sus predecesoras, aunque el optimismo y la confianza en un entorno incierto y desigual se reducen. Están desencantados con los motivos de las corporaciones aunque es la fuerza poderosa que necesita el mundo para cambiar las cosas que ya vienen dadas. El mundo necesita una generación ocupada en gestionar su evolución personal, buscar la paz, descubrir fuentes saludables, cuidar y nutrir la madre tierra, y contribuir en otros para dejar una huella intacta contra el paso del tiempo. El mundo necesita una generación disruptiva.
Si bien yo nací en 1979 siento que formo parte de esa generación disruptiva ¿Tú? ¿Cuál es la característica que te destaca y no he descripto?
Un abrazo, Laura
Marketinera y fundadora de WOWness